Publicado el 7 de febrero de 2013

Cine

Orlando Mora asegura que la gran pasión de Aguirre era el cine porque, a pesar de que exploraba otros campos como la fotografía y la narración deportiva, volvía al Cine Club o retomaba su columna crítica sobre el séptimo arte.

Írrito y cálido

 

El personaje público. Eras ese a quien paraban en la calle para hablarle de libros, de columnas de opinión o de cualquier tema. Ese columnista, fotógrafo, librero, abogado, crítico de cine, editor, comentarista deportivo. Ese era otro personaje distinto al que yo conocí.

 

En nuestra familia siempre ha sido común reunirse a comer. Usualmente donde la abuela. Ahí fue donde te conocí.

 

Cuando hablabas, todos callábamos. Los niños poco podíamos decir. De hecho, no decíamos nada. Nos sentábamos a comer pasantes mientras ustedes, los grandes, discutían. Un yerno tuyo siempre te llevaba la contraria sólo para ver cómo reaccionabas y para generar polémica.

 

Por tu parte, siempre argumentabas con vehemencia por qué sí, por qué no, por qué esto, por qué lo otro. Con un tono seco, contundente y una mirada fija. Luego, reían y se pasaba a otro tema en el que se mantenía el mismo estilo de decir, contradecir, argumentar, reír. Los temas eran diversos. Medios de comunicación, políticos, películas, libros, casos judiciales, etc.

 

Una vez llegaste iracundo porque en El Colombiano les habían pedido a los columnistas que no escribieran sobre unas elecciones a la Alcaldía.

 

Empezaste a relatar qué había pasado. Los ojos tenían una mirada fija, las cejas se ciñeron un poco, la frente se arrugó, subiste una de las manos hasta la cara y empezaste a argumentar en un tono seco. Aseguraste que era el colmo esa exigencia por parte del periódico local. Que era ridículo limitar a los columnistas de opinión de esa manera. Que en ningún caso, nadie podría pedir que se no hablara de sexo, política o religión. Que si no se hablaba de eso, ¿entonces para qué hablar?

 

Pero una vez pasó el tema, comenzaron las risas de nuevo, como era costumbre. La cara se te alegraba, ya no fruncías el ceño y empezaban las sonrisas con unos ojos más cálidos, más vivos. Y allí, en la alegría, de nuevo eras el centro de atención.

 

Pocas veces tus ojos tenían lágrimas. Una de ellas fue cuando supiste sobre mi trabajo de grado.

 

En una noche, acordamos vernos al día siguiente a las 9:30 a.m. Al  llegar a tu edificio, el portero dijo que ya habías salido. Se te había olvidado la cita a causa de tus problemas de memoria. Fui al lugar donde estarías. Al llegar, me miraste impresionado y preguntaste, con cierto tono de tristeza, si se te había olvidado el encuentro.

 

Comenzaste a hablar de diferentes temas. Había ciertas preguntas que reiterabas en cada visita. Siempre querías saber si yo conocía tu edad. La otra pregunta era de qué se había muerto tu hermano y la última era qué semestre estaba cursando yo. Esas preguntas se repetían una y otra vez en la misma conversación, en todas las conversaciones.

 

Esta vez, después de la última pregunta, quisiste saber sobre qué iba a hacer mi trabajo de grado. Con un nudo en la garganta y esperando una respuesta severa, cortante, te dije que lo haría sobre ti. Durante un segundo, me preparé para el regaño respectivo. Me imaginé que dirías que era una “patochada” (esa palabra que tanto te gustaba) por el hecho de hacerte un homenaje, en cierto sentido.

 

Comenzaste a reaccionar. Lo primero fue una sonrisa con la que mostrabas tus dientes y, por ambos ojos, se te salieron un par de lágrimas. Te pareció muy bueno. Ayudarías en lo que fuera necesario.

 

La conversación continuó. Con el paso de los minutos, repetiste las mismas preguntas de siempre. La del trabajo de grado surgió de nuevo. Otra vez, las sonrisas, la mirada cálida y una que otra lágrima.

  • El imperialismo cinematográfico explicado por Aguirre

    En 1997, Alberto Aguirre tuvo por segunda vez un programa de crítica de cine en la emisora Radio Bolivariana llamado "Del cine y la televisión". Éste tuvo 20 emisiones, cada una de 30 minutos. Uno de los temas recurrentes era el poder cinematográfico de Hollywood. He aquí un aparte de sus críticas.

     

    (Este archivo sonoro fue tomado de la fonoteca de la emisora Radio Bolivariana F.M., perteneciente a la Universidad Pontificia Bolivariana con sede en Medellín).

  • Aguirre cuenta la historia del Cine Club de Medellín

    En 1997, Alberto Aguirre tuvo por segunda vez un programa de crítica de cine en la emisora Radio Bolivariana llamado "Del cine y la televisión". Éste tuvo 20 emisiones, cada una de 30 minutos. En una ocasión, habló de Camilo Correa y de la importancia de Procinal (de creación de éste) en el cine colombiano. En ese programa, explicó el nacimiento del Cine Club de Medellín y las transformaciones que tuvo años después.

     

    (Este archivo sonoro fue tomado de la fonoteca de la emisora Radio Bolivariana F.M., perteneciente a la Universidad Pontificia Bolivariana con sede en Medellín).

  • Alberto Aguirre critica el premio Óscar

    En 1997, Alberto Aguirre tuvo por segunda vez un programa de crítica de cine en la emisora Radio Bolivariana llamado "Del cine y la televisión". Éste tuvo 20 emisiones, cada una de 30 minutos. En uno de esos programas, Aguirre habló en contra del Oscar, uno de los premios más importantes del cine mundial.

     

    (Este archivo sonoro fue tomado de la fonoteca de la emisora Radio Bolivariana F.M., perteneciente a la Universidad Pontificia Bolivariana con sede en Medellín).

  • Crítica a Los Cazadores por Alberto Aguirre

    En 1997, Alberto Aguirre tuvo por segunda vez un programa de crítica de cine en la emisora Radio Bolivariana llamado "Del cine y la televisión". Éste tuvo 20 emisiones, cada una de 30 minutos. Con sus argumentos y sus calificativos como "patochada" o "ditirambo", Aguirre destruía las películas que le parecían una basura. Pero también hacía buenas críticas por la realización de algún film. En este caso, exaltó la producción sueca "Los Cazadores".

     

    (Este archivo sonoro fue tomado de la fonoteca de la emisora Radio Bolivariana F.M., perteneciente a la Universidad Pontificia Bolivariana con sede en Medellín).

  • Crítica a La Deuda por Alberto Aguirre

    En 1997, Alberto Aguirre tuvo por segunda vez un programa de crítica de cine en la emisora Radio Bolivariana llamado "Del cine y la televisión". Éste tuvo 20 emisiones, cada una de 30 minutos. En uno de esos programas, Aguirre criticó e el cine colombiano al decir que hasta el momento no se había hecho ninguna película buena, a excepción de "Rodrigo D No Futuro" y "Cóndores no entierran todos los días". En esa ocasión, se fue lanza en ristre contra la película colombiana del entonces: "La Deuda".

     

    (Este archivo sonoro fue tomado de la fonoteca de la emisora Radio Bolivariana F.M., perteneciente a la Universidad Pontificia Bolivariana con sede en Medellín).

  • María Helena Vivas - Las enseñanzas de Alberto Aguirre en el cine

    María Helena Vivas López es egresada de Comunicación Social -- Periodismo y magíster en Filosofía de la Universidad de Antioquia. Fue vice - decana y decana de la Facultad de Comunicaciones y vicerrectora de Extensión de la misma universidad.

  • Aura López - Aura López narra la mirada de Aguirre en el cine

    Aura López Posada trabajó muchos años en diferentes emisoras de Medellín y de Colombia realizando entrevistas a diferentes personajes. Además, esta locutora, escritora y poetisa ha sido una líder cultural en la ciudad por sus obras realizadas y por sus trabajos en el Museo de Antioquia y en el Jardín Botánico Joaquín Antonio Uribe de Medellín.

  • Orlando Mora - Alberto Aguirre en el cine de Medellín por Orlando Mora

    Orlando Mora es abogado de la Universidad de Antioquia pero toda su vida la ha dedicado al cine. Ha sido crítico cinematográfico en los periódicos de Medellín, jefe de programación del Festival Internacional de Cine de Cartagena e integrante de la Federación Internacional de Críticos de Cine (FIPRESCI, por sus siglas en inglés).

  • Maryluz Vallejo - Maryluz Vallejo recuerda las críticas de cine de Aguirre

    Maryluz Vallejo es periodista de la UPB y doctora en Comunicación Pública de la Universidad de Navarra en España. Ha publicado 8 libros y, actualmente, es profesora de la Universidad Pontificia Javeriana, donde creó la revista Directo Bogotá.

Agradecimientos: Familia Aguirre López, Carlos Arango, Luisa Restrepo Pérez, Ramón Pineda, a mis maestros del pregrado.

© 2013 Alberto Aguirre. Todos los derechos reservados. Realización: Maria Clara Calle Aguirre | Diseño: Daniel Correa Henao | Asesoría: Ximena Forero Arango.

Esta página web es un trabajo de grado del pregrado en Periodismo de la Universidad de Antioquia. Obtuvo el sustento del Fondo de Apoyos a Trabajos de Grado.

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